En el año de 1538, Francisco Pizarro manda al conquistador Sebastián de Torres a fundar el asentamiento minero en Huaraz. Años siguientes en 1574, Alonso de santoyo crea el pueblo de Huaraz, donde lo denomina como San Sebastián de Huaraz.

El 25 de julio de 1857, fue fundada la primera provincia de Huaraz en la cual se basó a la ley que se dispuso en ese tiempo, con su capital siendo el mismo nombre de la ciudad, se creó junto con la segunda provincia de Huaylas.

Basándonos un poco a años anteriores, también por ley; el 2 de enero de 1857, se creó el primer consejo Provincial de Huaraz.

El 5 de marzo de 1936, la provincia de Huaraz se tuvo que dividir nuevamente por ley, siendo esta vez la tercera provincia de Huaraz, con la misma capital y en la provincia de Aija, nombrado con el mismo nombre como su capital.

Por decreto de Ley 11171 la tercera provincia de Huaraz se dividió en la cuarta y última, por la cual actualmente es la provincia homónima, con su misma capital y en la provincia de Recuay.

Huaraz, una ciudad que resurgió de las cenizas

El terremoto de 1970 fue una tragedia sin precedentes para Huaraz. La ciudad perdió la mitad de su población y quedó en ruinas. Sin embargo, la voluntad de sus habitantes hizo posible que la ciudad resurgiera de las cenizas.

En los últimos 50 años, Huaraz ha experimentado un crecimiento sostenido. La ciudad se ha modernizado, con amplias avenidas y edificaciones recientes. De fuerte crecimiento hacia la zona oriental, Huaraz se ha orientado al desarrollo del turismo.

El jirón José Olaya es el único vestigio de la Huaraz de antes del terremoto. Las antiguas casonas de paredes encaladas, tejados rojos y balcones, desaparecieron del paisaje urbano. Una de sus características, las angostas calles, desaparecieron con la reconstrucción.

Las minas cercanas de Antamina y Pierina han atraído a profesionales y trabajadores a Huaraz. La ciudad ha crecido en torno a estas explotaciones mineras, y ahora es un importante centro económico y comercial.

La plaza de Armas de Huaraz es el corazón de la ciudad. Alrededor de ella gira la vida de toda la capital ancashina. El mercado de la ciudad también es un sitio interesante de recorrer, puesto que hay venta de géneros de todo tipo.